Christer Lilliehöök 12 de marzo de 1949 - 1 de abril de 2014
Durante su primera visita a Caux en 1967 se alojó en el Gran Hotel; y lo hizo mientras corría para coger el autobús que le llevaría a casa. Sin dudarlo un instante, Christer apoyó el pie en el bus y lo puso en su sitio con rapidez y fuerza.
Formó parte de la comunidad de Villa María en Caux durante muchos años. Durante años fue el más feliz, el menos complicado y el más gratificante de su vida.
Hace unos años, junto con su amigo, empezaron a escribir sus pensamientos sobre el tipo de vida que conduce a un mundo nuevo y que se sentían llamados a vivir. Como sus padres antes que ellos. Christer se sentía bastante frustrado, ya que se encontraba con nuevas formas de expresar las cosas que no entendía y le resultaban difíciles de aceptar. Intentaba, a su manera, transmitir sus convicciones, pero no siempre encontraba un oído comprensivo.